Es muy probable que en los últimos 20 años hayas oido la palabra “motion graphics”. Quizás en una animación de logotipo, o un gráfico en movimiento. La realidad es que la tecnología y el diseño han superado con creces lo que normalmente se conocía cómo gráficos en movimiento, y ahora se está integrando en todas las formas de contenido. Si se usa correctamente y se ejecuta cuidadosamente, aumenta la comprensión de nuestro mensaje. Hay multitud de elementos donde aplicar el diseño en movimiento. Nuestro preferido es en el diseño de logotipos. ¿Por qué? A continuación te explicamos que puedes conseguir animando tu logotipo.
Animando tu logo conseguirás convertirlo en un elemento único que destacará por si sólo. Hoy en día vemos miles de logos al día. Mediante la animación puedes añadir detalles que doten de más personalidad, carácter y reflejen mejor la marca que con un logo estático.
¿Sabías que en Instagram los vídeos generan un 38% más de engagement que las fotos? Una animación potente logrará llamar el interés de posibles clientes de forma más efectiva.
Tu logotipo será una de las primeras imagenes que verá tu audiencia. Para aumentar las posibilidades de convertirlos en clientes, causar una buena impresión es primordial. Un logotipo animado les sorprenderá positivamente, ayudando a que recuerden tu marca.
Netflix, Google, Apple y muchas otras marcas apuestan por el Motion Design desde hace tiempo. Demuestra a tu audiencia que estás al día con las tendencias de diseño actuales y mejora tu imagen de marca.
¡En muchos sitios! Funciona muy bien al inicio de un vídeo, ya que mejora el storytelling al crear una asociación orgánica de la narrativa con tu marca. También lo puedes utilizar en la firma de tus correos, una tendencia al alza en la actualidad. O en redes sociales, aumentando el reconocimiento de marca.